Es muy cansando sentir que estás en constante lucha con tu forma de alimentarte,
por un lado quieres tomar mejores decisiones que te acerquen a cumplir tus metas
y por otro sientes que te autosaboteas cada que estas por conseguirlo.
Disfrutas mucho comer en domingo pero sientes culpa el lunes.
La comida parece ser tu mejor amiga
y luego es tu ex novio tóxico al que no quieres volver a ver.
Te tengo una buena notica: ¡esto no tiene por que ser siempre así!